martes, 6 de octubre de 2015

Rubén Dario. Blasón


 Blasón 




El olímpico cisne de nieve 

con el ágata rosa del pico 
lustra el ala eucarística y breve 
que abre al sol como un casto abanico. 

 De la forma de un brazo de lira 
 y del asa de un ánfora griega 
 es su cándido cuello, que inspira 
  como prora ideal que navega. 

  Es el cisne, de estirpe sagrada, 
   cuyo beso, por campos de seda, 
  ascendió hasta la cima rosada 
  de las dulces colinas de Leda. 

 Blanco rey de la fuente Castalia, 
su victoria ilumina el Danubio; 
Vinci fue su varón en Italia; 
Lohengrín es su príncipe rubio. 

Su blancura es hermana del lino, 
del botón de los blancos rosales 
y del albo toisón diamantino 
de los tiernos corderos pascuales. 

Rimador de ideal florilegio, 
es de armiño su lírico manto, 
y es el mágico pájaro regio 
que al morir rima el alma en un canto. 

El alado aristócrata muestra 
lises albos en campo de azur, 
y ha sentido en sus plumas la diestra 
de la amable y gentil Pompadour. 

Boga y boga en el lago sonoro 
donde el sueño a los tristes espera, 
donde aguarda una góndola de oro 
a la novia de Luis de Baviera. 

Dad, condesa, a los cisnes cariño; 
dioses son de un país halagüeño, 
y hechos son de perfume, de armiño, 

de luz alba, de seda y de sueño.

0 comentarios:

Publicar un comentario